Gabriel Vanrell-Galeria d'Art

Ramón Aguilar i Moré, descendiente de una larga saga de fotógrafos, y con un padre médico que en su juventud tanteó la pintura, su pasión desde niño por captar la imagen en movimiento le llevó a ser un pésimo colegial y un excelente dibujante. Inicia sus estudios en la Escuela Blanquera, donde pudo manifestar sus dotes artísticas, ganando varios premios de dibujo de la misma escuela.

Aguilar Moré fue principalmente un artista autodidacta. En 1951 viaja a París, hecho que influye en su pintura. Se simplifican las formas y derivan hacia un expresionismo más marcado, haciendo breves incursiones en el cubismo, a la vez que substituyendo la línea por empastes de más gruesa trazada. Sus volúmenes pasan a formas y planos geométricos, dando importancia a la materia. El uso de la espátula también se hace presente en sus pinturas.  

Pintor de la realidad cotidiana, donde mejor ha expresado sus dotes de dibujante ha sido en la captación del ritmo. Así lo atestiguan sus cientos, sino miles, de dibujos de flamenco, sardanas, ballet y, sobre todo, jazz, así como los diversos libros que ha publicado sobre estos temas.